Segundo punto: el baño. Uno de los lugares por el hombre-novio con menos interés y concurrido. Es allí dónde la mujer se apodera de lugar. La variedad de cremas, tampones y líquidos por el hombre desconocidos invaden un armario entero; y champús y acondicionadores ocupan repentinamente el estantito de la ducha.
Obviamente, la mujer con el tiempo se acomodará y confiará; así que evitará zonas del habitáculo que le resulten incómodas. Digamos, por ejemplo, la cocina. Y el hombre tendrá que ir haciéndose cargo de estas áreas que discrimina ella.
Lo que al hombre se le pueda presentar como una sugerencia del tipo: "mi amor, ¿qué te parece si te compras un nórdico?" posteriormente se convertirá con orden y amenaza: "o te compras un nórdico de una vez o no vengo más a dormir a tu casa".
En definitiva, la mujer termina por controlar prácticamente la vivienda de su pareja y la vida, independencia y autonomía de éste.
Transcrito por Pecosa.
6 comentarios:
Completamente de acuerdo. Qúién lleva los pamntalones en una relación??
Siempre vosotras. En el momento que te dejas el cepillo de dientes en casa de una chica la has cagado. Perdón por la expresión.
la llamada mujerokupa. pueden empezar tb por las babuchas, la pasta de dientes, dos mudas... el resto viene solo
Exacto. No podéis hacer nada por evitarlo. Es así.
En mi caso, tengo tampones hasta en mis mochilas ... ¬¬'
¡¡Todo un machote, sí señor!!
(y yo encantado, ¿eh?, que me gusta también aportar mi parte de a trabajo a la tarta ...)
¡Y orgulloso que tienes que estar de llevarlos encima siempre! Que así si a tu fräulein un día le pilla de imprevisto el "chaparrón" y no lleva tampones encima, la sacas del apuro, te conviertes en su salvador ¡y le resultarás más irresistible todavía! ¡Es así de simple! ¡¡Si es que no es tan difícil contentar a una mujer!!
Eso mismo.
Llevar tampones en la mochila es de ser un caballero, como dice ella.
Publicar un comentario