jueves, 31 de julio de 2008

El Espíritu de las Vacaciones

No dejéis que el título del post os engañe. No voy a hablar del espíritu que tiene la gente durante las vacaciones, ni de que hay que aprovechar el tiempo y desconectar ni rollos moralistas. Voy a hablar literalmente del Espíritu de las Vacaciones, porqué creo que existe, y se me ha manifestado.
La cuestión es que yo este año venía diciendo que no me sentía con necesidad de vacaciones, y que quizás esperaba para cogerlas después de agosto. La empresa decidió cerrar las dos semanas centrales de agosto con las consecuentes vacaciones obligadas para todos a las que, por supuesto, no he hecho ascos... Pero insisto, no sentía aquello que se suele decir de "ufff, necesito unas vacaciones ya". Y ahí fue cuando el Espíritu de las Vacaciones, viendo que un ser humano sentía que podía prescindir de él, entró en acción. De un día para el otro parece que el mundo se ha vuelto loco y llevo dos semanas de aúpa. El Espíritu de las Vacaciones ha actuado, provocando algún que otro caos (nada grave, pero caos al fin y al cabo) en mi ambiente laboral. Y así, cual Don Quijote de la Mancha, no me he dedicado a otra cosa que no sea desfacer entuertos y tomar tilas con azahar.
Has ganado, Espíritu, ¿querías que te deseara? Ya te deseo, te deseo como hacía años que no te deseaba. Y ahora me castigas haciendo que ésta sea una de las semanas más largas de las que he vivido últimamente. Ten compasión, aún me queda la semana que viene, no hagas que sea tan lenta como ésta... ¿Qué debo hacer para honrarte? ¿Mando una ofrenda floral a Marbella, destino vacacional? ¿O mejor sacrifico un pollo en tu honor en un altar improvisado en pleno Marina d'Or, ciudad de vacaciones?
¡Pide, Espíritu, pide! ¡Estoy dispuesta a cualquier cosa , pero haz pasar el tiempo!

lunes, 28 de julio de 2008

¿A santo de qué...

... otra película de "Expediente X"?

viernes, 25 de julio de 2008

Look urbano

Venía hacia casa de tomarme unos chacolís con una amiga (¿cómo es posible que tres deditos de nada la pongan a una tan contentilla?) cuando me he cruzado por la calle con un chico rapado por los costados y con una cresta entre punk y hippy (era de rastas) que le descansaba literalmente en la nariz. Es decir, las dos o tres rastas más cercanas a la frente, supongo que del peso, le reposaban sobre toda la longitud de su napia, ejerciendo ésta de cómodo (o más bien todo lo contrario, a mi parecer) aposento para su "flequillo". Eso quita ángulo de visión, ¿no? En realidad es como tener un tabiquito sobre la nariz, si miras hacia un lado tienes que además girar la cabeza para enfocar con los dos ojos, ya que sinó, con semejantes churros sobre el hocico, sólo ves con uno. ¿Es necesaria tal incomodidad visual a cambio de un peinado singular? ¿O uno simplemente se acostumbra, como esos perros cuyo flequillo apenas deja ver entre sus mechones?

Marihuana?

Después de cenar. Mientras recojo la mesa. Anuncios en la tele:

HERMANA: - Tía, las pastillas Calgonit Powerball son como el logo de Gran Hermano!
PECOSA: - ...
HERMANA: -Que sí, hombre! Son azules y con la esfera roja en medio, como el ojo de Gran Hermano
PECOSA: - ... Creo que me voy a la cama.

martes, 22 de julio de 2008

Cuentos chinos

¿Porqué los restaurantes chinos son tan grandes si nunca se llenan ni siquiera a la mitad? De hecho... ¿cómo sobreviven, si la mayoría están siempre vacíos?

Si la tortilla de patatas que hace mi madre no sabe igual a la tortilla de patatas que hace mi abuela, ¿porqué la comida de todos los restaurantes chinos sabe igual?

¿Porqué nunca he visto a un chino en...
... un bar
... un supermercado
... una tienda de ropa
... un parque
... una peluquería
...una discoteca
De hecho, ¿porqué nunca he visto a un chino en algún lugar que no sea un restaurante chino o un chino (tienda)?

Tampoco he visto nunca a un chino conducir, piropear a una mujer que pasa por la calle o practicar algun deporte.

Son gente rara, ésta, ¿no?

lunes, 21 de julio de 2008

Autómata

qué sueño...

... fijo la vista en cualquier lado ... se me queda la mente en blanco....

... el motor del aire acondicionado me resulta un ruido sedante....


... qué sueño...

... camino y me da la sensación de que los pies no me tocan el suelo...

... actúo por inercia, como un autómata, sin pensar....



... tanto me cuesta que ni bostezo ...

... todo me suena a canción de cuna...



...uff... pero qué sueño...

jueves, 17 de julio de 2008

Histerismo pre-vacacional

Definitivamente, la gente se va poniendo histérica gradualmente a medida que pasa el mes de julio y se aproxima el mes vacacional por excelencia.

Julio empieza como todos los meses, pero es un engaño, hay algo que lo descontrola: durante la primera semana los dormidos que esperaban a preparar las vacaciones porqué "aún queda tiempo", despiertan y ven que "¡se nos ha hechado el tiempo encima!". Entonces durante las primera semana y parte de la segunda la gente piensa qué narices va a hacer, a qué lugar de ensueño (o sucedáneo) va a ir a desconectar del trabajo; realizan las reservas de última hora...

Durante la segunda semana la gente, ya en su mayoría organizada y con el dinero de la paga doble de verano bien invertido, empieza a tener una cosa menos de qué preocuparse y, por lo tanto, busca otra distracción, por ejemplo, cambiarse los armarios.

Empieza a notarse aumento de afluencia de gente en el local (tampoco mucha, que estamos en crisis...). "Me quiero hacer...", "necesito amueblar...", "me quiero cambiar...", y otros tantos etcéteras de necesidades mueblísticas que, por una razón que se me escapa, urge hacer antes de verano. Cosa no posible. "Pues no lo entiendo...". Suspiro.

A todo esto, lo que ya está entregado:
- ¿Y cuando me pondréis la puerta que falta?
- En cuanto la fabriquen de nuevo, hubo un error de medidas
- Es que, a ver, yo si pago es para que me monten el armario.
- Ya sabe que en el trabajo a medida a veces algo puede no cuadrar... Por supuesto, no liquide el pedido hasta que no se termine de...
(interrumpe) -¡¡Por supuesto que no lo voy a liquidar!!
(pensando) - Tómese un valium, caballero...

Mi compañera (está embarazada, así que supongo que serán las hormonas, también) se ha colgado el teléfono con tres clientes histéricos... (se juntan el hambre y las ganas de comer...)

A ver si se van todos de vacaciones ya.

martes, 15 de julio de 2008

Genio y locura

Hace unos meses quedé con un amigo (al que veo dos veces al año, con suerte, pero al que aprecio mucho) para tomar unas birras (más de una...). Los dos somos aficionados al motociclismo, y empezamos a hablar de Pedrosa, y del deporte en general... Caímos en la cuenta de que muchos ases del deporte español tenían ese punto... raro. Cómo decirlo... Dani Pedrosa tiene ese toque autista, misterioso. Fernando Alonso es medio "paradito" según como... Gasol, Induráin, Nadal, Ángel Nieto... ¿Me lo parece a mí o todos tienen un punto rarito? Grandes deportistas, nadie lo duda, pero con algo que no acaba de cuajar... Les falta un hervor... ¿Cómo puede ser que teniendo tanto talento para un deporte parezca que les falten luces?

Deportistas aparte, quiero hablar de personas RARAS, con todas las letras, de las que alguna vez hemos dicho: "a éste se le va la olla...". Quiero hablar de grandes artistas únicos como Dalí o Van Gogh; la mayoría de filósofos, científicos y matemáticos de la historia; cineastas estrambóticos como Tarantino, Kubrick o Lynch; músicos; niños prodigio... Todos genios en sus campos, y todos locos en más o menos medida...

Lo que a mí me tiene la neurona inquieta es: ¿qué fue antes, el genio o la locura? Es decir, ¿un genio se vuelve loco dada la gran capacidad intelectual que tiene, o bien la locura genera genios, ya que se les ocurre cosas que a los "seres humanos normales" ni se nos hubiera pasado por la cabeza?

¿Qué sería del mundo sin la locura de aquellos que han ayudado a darle forma?

Posiblemente hoy estaríamos todos locos...

viernes, 11 de julio de 2008

Monotemáticas (¡SOCORRO!)

¿¿POR QUÉ LAS MADRES DE HOY EN DÍA NO SABEN HABLAR DE OTRA COSA QUE NO SEA DE SUS HIJOS??

Mufas, suerte y supersticiones

Una de las cosas buenas de vivir en una ciudad es que casi siempre hay algo que hacer. Y una de las cosas buenas del mes de julio Barcelona es que hacen cine al aire libre en varios lugares de la ciudad, la mayoría de acceso gratuito o, a lo sumo, pagando 3 euros...

Justo vuelvo del centro cívico de mi barrio, en cuyo exterior estaba la pantalla gigante donde han proyectado La suerte está hechada, una película argentina que habla, en su mayor parte, de un hombre gafe (mufa, como dicen allí). Qué cosa eso de ser gafe... Realmente todos en algun momento u otro hemos sentido que atraemos la mala suerte, y que la contagiamos a nuestro alrededor. ¿Quién no ha sido gafe alguna vez? Todos lo hemos sido en algun momento, o durante algun tiempo, hasta que ha pasado la racha.

Hay un personaje secundario en la película que cuenta que fue gafe, lo sigue siendo y posiblemente dé a entender que lo siga siendo siempre... (encima le saca rendimiento económico a esto del gaferío, el vivo...). ¿Existirá realmente gente con tal condición? Es decir, ¿es posible que alguien pueda, por las razones que sean, provocar tanta mala pata allá dónde vaya? ¿O es que se le da demasiada importancia a las cosas? ¿Es, como se dice en un momento de la película, un problema de egocentrismo?

También trata el tema de que nuestra suerte cambia de un momento a otro, y que la mayoría de veces ni nos damos cuenta. Podemos pasar de estar en el "bando de la mala suerte" al "bando de la buena suerte" (o viceversa) en cuestión de segundos, muchas veces siendo este cambio condicionado por cosas ajenas a nosotros... Es como una rueda... Las cosas que uno haga, afectan a uno y al resto, es algo realmente karmático...

Poca gente no es supersticiosa en algo, siendo muchos "supersticiosos por si acaso". Pero, ¿tienen sentido las supersticiones? ¿Existe la suerte, buena o mala? A veces creo que sí, pero pensándolo friamente, creo que las cosas son como son por algo, no por un simple azar o suerte. Creo que es verdad que una persona positiva atrae las cosas buenas y una negativa las malas, pero no creo que sea una cuestión de suerte, sinó de punto de vista.

Como se suele decir, las cosas tienen la importancia que uno le da...

miércoles, 9 de julio de 2008

Hacia la treintena

Más maniática.

Menos sociable.

Más independiente.

Menos fiestera.

Más mayor...

¿Serán los años? Es que me vengo estudiando desde que cumplí años hace unos meses. No sé porqué, pero a mi los 27 me han hecho reflexionar sobre un montón de cosas...

Estoy observando que tengo un montón de manías que antes no tenía. Tengo controlados los lápices, bolígrafos y rotuladores que tengo en el bote sobre la mesa del trabajo; si me falta alguno me rebienta. ¿Por qué cogen los bolis de mi bote? En el cajón hay más... Y que toquen las cosas de mi mesa, o que las cambien de posición... Me hierve la sangre... Soy una especie de Jack Nicholson en "Mejor Imposible", a veces...

Ya no me gusta eso de ir a lugares que están hasta arriba de gente: los centros comerciales, las calles del centro a pleno día, ir de rebajas, las macrodiscotecas... El otro día una de mis mejores amigas decía que tenía mono de salir a bailar, que hacía un montón de tiempo que no salíamos... ¡Ay, es que a mi no me apetece! ¿Porqué no tengo ese mono yo? Si me dices ir a tomar una copa a una terracita, o a un bar musical, y charlar y echarnos unas risas, jugar a los dardos... Pero, ¿bailar? ¿Con todo el mogollón? ¿Y sudar y llegar a casa con el pestazo a humo y a humanidad? Si es que no me apetece... Soy una muermo, sí...

También era más tolerante, pasaba más por el aro... ¡Qué exigente ahora! Con la gente y con las cosas. Es como si ya no estuviera para tonterías: las cosas claras y el chocolate espeso. Cada vez aguanto a menos gente, supongo que cada vez menos gente me aguanta. Selectivismo por parte de todos. Imagino que la gente que se queda al lado de uno debe hacerlo por amor, del tipo que sea...

Que no soy un ogro, ni mucho menos (quizás sólo de vez en cuando) pero sí me han cambiado muchas cosas, pienso con otra cabeza... A veces pienso si soy menos divertida, aunque creo que más bien es que busco una diversión diferente.

Ya no me vale la vida de veinteañera. Qué cosas...

lunes, 7 de julio de 2008

Como una nena

Una horita estuve nada más.

El sol me acaloró lo justo mientras estaba tumbada. Me incorporé y miré a la gente que se bañaba. Los miré durante unos minutos, no porqué tuviera dudas o pereza, sinó porqué quería que mis ganas fueran creciendo. Hasta que pensé: "ya!". Me levanté y fuí caminando, tranquila, hasta la orilla. No quería parecer desesperada, aunque venía pensando en este momento a lo largo de toda la semana.

Cuando el agua me tocó los dedos de los pies no paré, seguí caminando como si no hubiera agua. No llegaba a estar agitada, pero el agua traía alguna que otra ola un poco movida, cosa que lo hacía divertido.

Me lancé tímidamente, luego ya me zambullí. No podía dejar de sonreír, como si fuera una nena.

Una abuela bromeaba a las otras cerca de mí, diciendo que se iba nadando a las Canarias. La otra se molestó en indicarle que las Baleares le quedaban más cerca... Yo mientras nadaba, y seguía sonriendo. Quise quedarme en el agua hasta que empezara a sentir frío, entonces salí y me sequé al sol.

Volví. Casi era la hora de comer.

Ay... que no me quiten el mar...!

viernes, 4 de julio de 2008

Ni con oro

Llevamos tres días de olores nauseabundos en el local. Nos están cambiando los bajantes de saneamiento, que pasan por el techo de nuestra tienda y estaban agujereados por todas partes (he aquí la plaga de cucarachas - véase Mutantes).

Los caballeros encargados de tal faena tuvieron la delicadeza de ir puerta por puerta por el bloque avisando a los vecinos de que iban a realizar tales cambios y que, por favor, no usaran el agua hasta medio día. Caso omiso. Una embarazada mandó su "malestar" por la tubería hasta caer en manos (literalmente) de uno de los lampistas, y la mayor parte del bloque nos fue mandando "parte de ellos" a lo largo de toda la mañana. La tienda era una versión sucia de Waterworld (sería algo como "Waterclosetworld"), un charco hediondo que había que ir fregando cada tanto... Y nosotras aún podíamos salir a la calle cuando no lo soportábamos más, pero a los pobres trabajadores no les quedaba otra que aguantar el chaparrón, nunca mejor dicho...

Entiendo que uno deba usar el WC, pero creo que más todavía hay que entender a esta gente que realiza este tipo de trabajos que cada vez menos españoles quieren hacer dado lo desagradable que puede llegar a ser (no digo que no haya ningún español que realice trabajos duros, pero sí que cada vez hay menos). Más de un vecino tendría que haber pasado aquí el día, a ver qué le parecía.

Hoy les he traído en un termo de gazpacho fresquito para amenizarles la faena, pero resulta que no les gusta... Con lo rico que está! En fin, tó pa' mi! Por suerte (para nosotras, porqué por desgracia ellos tendrán que seguir aguantando la poca solidaridad de la gente que no respeta a los que trabajan) hoy terminan la obra.

Desde aquí mi admiración y respeto a todos los trabajadores que realizan las labores más duras con profesionalidad, como la que están demostrando tener estos chicos. Desde luego, no sé lo que cobrarán, pero hay cosas que no se pagan ni con oro.